“TEOGONÍA PLÁSTICA” está destinada a irrumpir nuevas narrativas artísticas, estética y desarrollos en la carrera de Nix Ruo, al igual que condiciones sociales que envuelven su producción artística y subjetividad específica del espectador.
por Fernando Sanchez
Esto sugiere que la fuerza caótica del color siempre está presente en la obra de este artista, reorganizando la relación con el pasado, el presente y el futuro hacia nuevas constelaciones. Sus pinturas nos recuerdan que el conocimiento es inestable y que hay otras memorias a las que aglutina el inconsciente colectivo que resiste el paso de la historia.
En vez de usar el trabajo reciente para dar sentido a la práctica autodidáctica, Nix da luz a preocupaciones incrustadas, temas y motivos que han estado resonando en la práctica de su vida desde las etapas más prematuras de su visión sobre los mitos. El resumen abstracto de la exposición se asemeja a una transformación igualmente importante en la propia vida del artista.
En vez de usar el trabajo reciente para dar sentido a la práctica autodidáctica, Nix da luz a preocupaciones incrustadas, temas y motivos que han estado resonando en la práctica de su vida desde las etapas más prematuras de su visión sobre los mitos. El resumen abstracto de la exposición se asemeja a una transformación igualmente importante en la propia vida del artista.
Desde este ángulo, el hilo más fuerte que une las obras del artista a su práctica más reciente, es la lucha por aislar las apariencias “mitológicas” de la representación analógica, centradas en el ser humano, desde su realidad más allá del tiempo y el espacio. La exposición enfatiza con dinámica propia la experiencia humana a favor de cambios caóticos y cósmicos que están en el corazón de la evolución del lenguaje, la razón y la lógica entre animales, humanos y dioses míticos por igual.
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